La agente fiscal Vivian Coronel, de la Unidad Especializada de hechos punibles contra Niños, Niñas y Adolescentes lideró dos procedimientos que derivaron en la detención de dos mujeres sindicadas de haber practicado un aborto del que resultó víctima una niña de 11 años.
La misma era abusada sistemáticamente por el padrastro y como consecuencia quedó embarazada.
Además de haberla vulnerado en reiteradas ocasiones, el hombre sería responsable de la práctica del aborto solicitando que una empírica que realice la interrupción del embarazo.
En tanto que la mujer que realizó el aborto, posteriormente tuvo encerrada a la niña por tres días mientras se recuperaba, para luego dejarla en libertad. Durante el allanamiento fueron halladas todas las evidencias, produciéndose la detención de dos mujeres involucradas en el hecho.
La fiscal halló en el procedimiento, elementos quirúrgicos, medicamentos, ropas aún con rastros de sangre y coágulos que utilizarían como apósitos.
La niña era vulnerada a tal punto que el padrastro controlaba el periodo de la misma, quién al percatarse del embarazo habría ordenado la interrupción, cuya gestación sería de más de dos meses.
La víctima era encerrada bajo llave en una habitación en condiciones deplorables, accediendo una sola vez al día a su alimentación, sin consumir siquiera agua.
Además de todas las atrocidades, también los intervinientes presumen que la dueña de la casa se dedicaría a realizar trabajos de magia negra.
La madre, señalan los primeros informes, que esta aquejada de una enfermedad postrada en cama y 1 semana atrás había dado a luz. No se descarta que existan más implicados por lo que prosiguen las investigaciones en torno al caso.
Fuente: Ministerio Público