Dejó secuelas a favor y en contra la aprobación por la Cámara de Senadores del proyecto de ley que reconoce como compensación histórica, beneficios laborales a los extrabajadores, obreros originarios, constructores, contratados directos, de empresas contratistas subcontratistas de obras, locadores y sub locadores de servicio y de los convenios de salud y de educación, de la usina de Itaipu margen derecha.
El proyecto sancionado la semana pasada en la Cámara de Senadores, ahora deberá ser analizado en la Cámara de Diputados. Su vigencia supone el pago de más de 940 millones de dólares a unos 15 mil exobreros de la binacional distribuidos en toda la República.
En un comunicado la Itaipu señala que el pago efectuado en el lado brasilero fue a empleados contratados directos por la entidad y no extrabajadores de empresas contratistas y subcontratistas. Asegura que el pago realizado fue vía sentencia judicial, tras en un juicio iniciado por sindicatos de la margen izquierda en tiempo y forma.
Insiste que la entidad no efectuó pago alguno a empleados de empresas contratistas y subcontratistas por beneficios laborales adicionales, tal como se alega en el proyecto de ley aprobado. También sostiene que no se “ajusta a la verdad” que con los gastos de explotación de la entidad se podrá cubrir la pretensión de compensación histórica que plantea la ley. “Esta erogación sin duda afectará al Estado paraguayo, teniendo en cuenta la utilización de royalties y Fonacide”.
Además, alega que los gastos de explotación de la Itaipu deben ser consensuados y aprobados anualmente por ambas márgenes (Brasil y Paraguay). Dentro de estos gastos no se incluyen ningún tipo de rubros para compensación histórica destinadas a personas “extrañas a la entidad, a excontratistas y subconstratistas”.
“Itaipu siempre sostuvo y sostendrá que esta obligación que se le pretende imponer es jurídica y económicamente inviable, que no es la entidad la que debe responder por esta pretensión y que todos estos reclamos están definitivamente prescriptos”, resalta.
REACCIÓN
La Unión Nacional de Ex Trabajadores de la Itaipu Binacional Margen Derecho (UNETIBMD) también emitió un manifestó público de aclaratoria. Aseguran que la ley aprobada por el Senado solo pretende “compensar la violación del Tratado de Itaipu, específicamente del principio de isonomía, de igualdad de trato, de no discriminación y de la aplicación de la ley más favorable, derivados de los protocolos de trabajo y de seguridad social, aplicables a los trabajadores de la Itaipu”.
Aclara que la ley en cuestión no obliga a la binacional a pagar indemnizaciones o beneficios laborales, como falsamente se afirma. Con relación a las notas reversales, que según la senadora Desireé Masi, llevó a la prescripción de los derechos reclamados por los extrabajadores, aclaran que son falsas e infundadas.
Afirma que el protocolo de relaciones laborales al que hace referencia la legisladora nunca trató sobre temas referidos a la prescripción. “Lo único que fue redefinido fue el cambio del principio de responsabilidad solidaria de la Itaipu Binacional con relación a los pagos de los beneficios laborales a los trabajadores de las empresas contratistas, pasando de solidarias a facultativas”.
Insisten que es falso cuando “se pretende hacer creer que, en virtud, al protocolo aprobado en el año 2003 haya prescrito los derechos. Reiteramos en este sentido que los plazos no juegan un papel liberatorio a responsabilidades, cuando se trata de violaciones de derechos humanos”.
FALSO
La UNETIBMD puntualiza que es falso que todos los paraguayos tengan que cargar con el pago de estas compensaciones y que los recursos saldrán de las arcas del Estado. “Estas compensaciones son legítimas y legales y es un patrimonio genuino de los extrabajadores paraguayos que construyeron la monumental obra de Itaipu y serán pagados con fondos propios de la binacional. Por lo que no afectan un centavo del Presupuesto General de Gastos de la Nación. Una observación objetiva, llevaría a concluir que el pago de estas compensaciones generaría riqueza en nuestro país, pues el efecto multiplicador en la alicaída e ilíquida economía paraguaya es indudable”.
Fuente:La Clave