Los gobiernos de Paraguay y Brasil suscribieron este viernes el Compromiso de Asunción contra la corrupción, el crimen organizado y el lavado de activos, con presencia del presidente Santiago Peña en Mburuvicha Róga.

En la ocasión, el ministro del Interior, Enrique Riera aseguró que el documento fue elaborado con mucho patriotismo, confianza y en sintonía con ejes prioritarios del Gobierno, que es la lucha contra la corrupción y el crimen organizado.

Asimismo, según dijo, representa una suma de voluntades políticas que involucra a más de siete instituciones entre paraguayas y brasileras.

“No es ningún secreto que el crimen organizado y la corrupción son males que afectan al mundo entero en particular a nuestra región y nuestros países”, indicó al tiempo de describir como un “romance largo” a los vínculos de cooperación que mantienen Paraguay y Brasil.

El objetivo consiste en aunar esfuerzos para combatir a quienes hoy se constituyen en una multinacional del crimen. Los estados estamos obligados a dar una respuesta igual o mayor con todo el peso que la ley lo reclama, subrayó.

Asimismo valoró la apertura y confluencia de los tres poderes del Estado del Paraguay fue clave para concretar este acuerdo. Se trata de una cumbre contra la corrupción y el crimen organizado, resaltó.

El gobierno del Brasil, gracias a las excelentes relaciones existentes entre los presidentes Lula Da Silva y Santiago Peña, brinda un importante intercambio de información y experiencia en materia de combate al crimen organizado, a los clanes criminales empotrados en los centros penitenciarios, manejo del sistema penitenciario y programas de rehabilitación y reinserción social para personas privadas de libertad (PPL).

El mayor desafío al orden jurídico es el crimen organizado

Por su parte, el ministro de Justicia de Brasil, Flavio Dino, manifestó que la unión de una nación solo es posible cuando todos cumplen las mismas leyes y tienen la capacidad de determinar la fuerza necesario para que el orden democrático prevalezca por sobre todos los poderes paralelos.

Asimismo, recordó que anteriormente en el continente se tenía la idea de que las amenazas a las soberanías de las naciones derivarían de enemigos externos, hoy no hay duda que el mayor desafío al orden jurídico democrático es el crimen organizado, de ahí la necesidad de impulsar acciones conjuntas.

Sobre el punto, declaró que el presidente Lula les pidió transmitir su confianza en las alianzas con los países vecinos.

“Tenemos metas y celebramos un compromiso de principios y esa es nuestra base, pero estamos simultáneamente estamos construyendo las paredes de ese edificio institucional como el comando tripartito entre Paraguay, Brasil y Argentina, al tiempo de buscar la dinamización del comando bipartito con Paraguay, que cubre actualmente acciones en Pedro Juan Caballero y Ponta Pora, con decisión declarada de expandir ese comando a otros puntos de la frontera”, detalló.

Igualmente indicó que se ha colocado en el mismo nivel la necesidad de compartir experiencias en el área penitenciaria, atendiendo a que dos grandes facciones brasileñas nacieron dentro del sistema penitenciario y se nutren de él, por lo que comprenderla y combatirla se constituyen en pasos estratégicos para garantizar la seguridad ciudadana.

Finalizó diciendo que este acuerdo es dinámico y se prevé otra reunión, el 9 de noviembre en Brasil, para actualizar las referidas metas.