Monseñor Gabriel Escobar, Obispo del Vicariato Apostólico del Chaco, presidió la misa de esta mañana, en el primer día del novenario en honor a la Virgen de los Milagros de Caacupé. Su homilía giró en torno del tema “La esperanza no defrauda”.
“Cómo no estar alegres este día en que iniciamos la fiesta de nuestra querida madre de los cielos que nunca abandona ni desoye los clamores de sus hijos y de sus hijas devotos, que a través de sus plegarias, súplicas, hacen llegar a la Mamá Guasu de todos los paraguayos”, comenzó resaltado en su homilía el prelado.
RUEGOS DE LOS PUEBLOS ORIGINARIOS
En esta cita espiritual de todos los que vivimos en estas tierras paraguayas, el Obispo del Chaco trajo los ruegos e inquietudes de los que hacen patria en Puerto Pinasco y sus campiñas, Tupasy Renda y Ceibo; de Puerto Pinasco y sus numerosos asentamientos conformados por los Maskoy.
Así mismo, cargó con las súplicas de comunidades de Puerto Sastre, de Carmelo Peralta y sus numerosas comunidades cristianas de los pueblos originarios Ayoreos; de Puerto Guarani, del Fuerte Olimpo y los pueblos originarios Ishir-Chamacoocos, Puerto María Elena, con la comunidad indígena Tomarajos.
También trajo a los pies de la Virgen las inquietudes de los de tierra adentro como Toro Pampa, Ñu Apu’a, colonia María Auxiliadora y Ex Obraje San Carlos y la lejana Bahía Negra, con su pueblo originario; Agua Dulce, Sierra León en la frontera con Bolivia.
PARAGUAYOS MIGRANTES
Monseñor Escobar también hizo suya las plegarias e intenciones de los compatriotas residentes en Argentina, Brasil, Estados Unidos, España y tantos otros países donde migraron por distintos motivos.
JUBILEO DE LA ESPERANZA
El obispo del Chaco recordó que el Año de la Oración nos invitaba a una mayor vivencia del amor fraterno, a ser solidarios, a vivir la justicia sin distinción, a tener un mayor cuidado de nuestra “Casa Común” y todo esto para prepararnos a vivir un Jubileo de la Esperanza 2025, con la apertura de la Puerta Santa en la Nochebuena de este año en Roma, y en todas las diócesis del mundo el domingo 29 de diciembre.
DIOS NO DEFRAUDA
En su reflexión, el prelado aseguró que el Jubileo 2025 nos recordará que “la esperanza en Dios nunca nos decepciona, sino que nos sostiene y guía a través de todas las dificultades”. En ese sentido, invitó a dejarnos iluminar y acompañar por la Palabra de Dios para que oriente y acompañe nuestro actuar en la vida, empezando por la familia, los amigos, el ambiente social y político del país donde vivimos.