Este lunes, el economista Ramón Ramírez inicia oficialmente la intervención en la Municipalidad de Ciudad del Este, designado por el Poder Ejecutivo para examinar la gestión del intendente Miguel Prieto. La medida se sustenta en 12 puntos señalados por la Contraloría General de la República (CGR), que servirán de eje para el informe final del equipo interventor.
Ramírez, acompañado por una docena de especialistas, afirmó que el trabajo será “técnico, conforme a las normas, y absolutamente libre de influencias políticas”. Si bien admitió que la intervención tiene implicancias políticas, remarcó que su enfoque será estrictamente profesional.
“La ciudadanía no debe sentir este proceso como una parálisis institucional. Los servicios municipales, especialmente los esenciales, deben seguir prestándose con normalidad”, expresó. Subrayó además que su rol será ejercer una función técnica “con respeto, pero con firmeza”, y que no tiene vínculo previo alguno con el jefe comunal.
Uno de los primeros pasos será un corte administrativo en la comuna, procedimiento que contará con el acompañamiento de la Escribanía Mayor de Gobierno. “Es un paso necesario dentro del marco institucional”, precisó el interventor.
Consultado sobre las 42 denuncias que pesan contra Prieto, Ramírez indicó que si bien el foco estará puesto en los puntos establecidos por la CGR, no descarta revisar otros aspectos que puedan surgir durante la auditoría. “Hay denuncias en sede fiscal que podrían tener relación con la gestión administrativa. Si detectamos algo, el deber del funcionario público es comunicar a las autoridades competentes”, concluyó.
Por otra parte, aunque Miguel Prieto instó públicamente a sus seguidores, a través de redes sociales, a mantener la calma y evitar actos de violencia, persiste la preocupación de que se obstaculice el trabajo del equipo interventor.